Los implantes dentales se tienden a identificar como un producto sanitario que pasa a ser insertado en el maxilar o en el hueso de la mandíbula a través de una cuidadosa intervención quirúrgica que tiene por objetivo reemplazar los dientes perdidos. Estos se encuentran elaborados a partir de titanio biocompatible, un material con el cual es posible evitar los posibles rechazos por parte del organismo, asegurando así la unión con el sistema óseo sin problema alguno.
Los implantes dentales como tal, cuentan con un diseño cilíndrico un poco roscado, presentan un diámetro y una longitud que se estima en conformidad de la cantidad y la calidad del hueso a suplantar. Estos logran cumplir el papel de raíz artificial a la que son atornillados los pilares y las coronas protésicas que van a restaurar la apariencia final como si de un diente natural se tratara.
¿Cómo se realizan estas intervenciones?
Para lograr planificar exactamente estas intervenciones, los dentistas deben efectuar ciertas pruebas de imagen, como las tomografías computarizadas y las radiografías panorámicas, así como lo hacen en la Clínica Dental Valcárcel. Estas son las que van a permitir estudiar el caso de manera individual, valorando así la calidad y cantidad de hueso para que se adecue el grosor, la longitud y la dirección del implante dental perfecto para cada paciente.
Este procedimiento es completamente indoloro y es efectuado bajo anestesia local, aunque se presenta la alternativa de sedación consciente si el paciente así lo desea a fin de hacer la experiencia lo más cómoda que se pueda. Básicamente es una labor simple y no tarda mucho tiempo, si bien para tener los dientes fijos se tiene que esperar entre una semana y 6 meses, todo dependiendo del protocolo aplicado.
¿Qué procedimientos de implantes dentales existen?
Para llevar a cabo la integración de uno o varios implantes dentales es necesario conocer cuáles son los diferentes procedimientos que en la actualidad se realizan y que presentan el mayor índice de resultados satisfactorios:
Implantes dentales con carga inmediata
Este procedimiento presenta ventajas como el hecho de que todo se simplifica en una sola intervención quirúrgica, evitando así una segunda cita para posicionar el pilar. En esta los pacientes van a portar de manera inmediata un diente provisional con el cual podrán seguir haciendo su vida normal. Además de lograr reducir los tiempos de espera necesarios para integrar la corona dental definitiva.
En este procedimiento es necesario evaluar la cantidad y la calidad del hueso que se va a necesitar para llevarlo a cabo.
Implantes dentales convencionales
Una intervención que se divide en dos fases. La primera va a ser la cita en la cual se procede a introducir el implante que tendrá que osteointegrarse sobre el hueso. Para esto es necesario atravesar un período de colocación que va desde los 3 o 4 meses en la mandíbula o 5 a 6 meses si es en el maxilar superior.
Posteriormente, en la segunda cita, se va a efectuar una incisión mínima que va a descubrir el tornillo para posicionar el pilar sobre el cual se va a atornillar la corona dental definitiva.
Implantes dentales con regeneración
En aquellos casos sobre los cuales se dispone de cierta cantidad y calidad de hueso deficiente se pueden efectuar diminutas intervenciones accesorios que van a asegurar el contorno ideal para la integración de un implante dental.
Acá, en una intervención previa, es colocado un hueso artificial o uno del propio paciente con el fin de aumentar el espesor que va a presentar el hueso disponible. A este procedimiento se le conoce como elevación de seno o regeneración guiada.
Ya una vez se haya completado con ese paso, se procede con el protocolo convencional de integración. Sin embargo, existen ciertos casos en los que esto se puede efectuar de manera simultánea a la colocación del mismo implante.