En la pelvis de las mujeres hay un órgano reproductor que, por desgracia, suele sufrir enfermedades: el útero. La cervicitis es una de las más conocidas, consistiendo básicamente en que el cuello del útero se inflama. A la lista hay que sumar otras que tal vez te suenen, tales como el prolapso uterino y la hiperplasia endometrial. Hoy hablaremos de una enfermedad en concreto.
El problema en cuestión es el de los miomas en el útero. Si desconoces esta afección, sigue leyendo, porque en próximas líneas profundizaremos en ella, averiguando exactamente qué son, los síntomas que provoca y qué maneras hay de eliminarlos.
Qué son los miomas uterinos
Básicamente se trata de tumores que no son malignos. Dichas lesiones benignas no siempre surgen en la misma área uterina, sino que pueden hacer acto de presencia en cualquier lugar del mencionado órgano reproductor. El origen de este tipo de miomas es el conocido como músculo liso uterino.
Incidencia en las mujeres
Si bien es cierto que algunas chicas jóvenes tienen miomas en el útero, lo más habitual es que surjan después de haber cumplido 40 años. A partir de esa edad, es destacable que aproximadamente la mitad de las mujeres sufren dicha condición.
Los estudios estadísticos no son los únicos que demuestran que los miomas uterinos tienen una gran incidencia en las mujeres de 40 años o más. También lo indican las visitas médicas que tienen lugar, siendo los ginecólogos y obstetras los encargados de diagnosticar esta patología.
Síntomas
Es habitual que el diagnóstico de una enfermedad se lleve a cabo en base a los síntomas que manifiesta el paciente. Sin embargo, en este caso hay que decir que, con bastante frecuencia, los miomas en el útero no afectan de ninguna manera.
Eso sí, no siempre son asintomáticos. Algunas mujeres sufren las consecuencias de diversas formas, siendo una de las más frecuentes la de notar molestias o incluso dolores manteniendo relaciones sexuales.
Ciertas chicas creen que lo que les pasa es que tienen otra dolencia como una infección de orina o incluso una ETS. La sorpresa se apodera de ellas cuando van al ginecólogo u obstetra y el diagnóstico es claro: tienen miomas en el útero.
Hablando de dolores, algunas mujeres también los experimentan durante el transcurso de la menstruación. Las reglas no solo pasan a ser sinónimas de dolor y molestias, sino también de abundancia. Es decir, la cantidad de sangre es notablemente superior en comparación con la de las chicas que no están afectadas por los miomas en el útero.
Obviando la incomodidad que esto supone, es reseñable que también puede derivar en un problema de salud. Nos referimos a la anemia. Así pues, aunque se trata de lesiones benignas, como estamos viendo generan problemas de diversa consideración, factor que se traduce en que convenga eliminarlos.
Antes de hablar de los métodos de eliminación de los miomas uterinos, hay que describir otro síntoma bastante frecuente que todavía no hemos mencionado. A veces, los miomas uterinos presionan órganos que se encuentran en las proximidades. Un claro ejemplo es el recto, añadiéndose al listado otro tan importante como la vejiga.
Tal vez con estos dos nombres ya hayas deducido cuál es el último síntoma que comentaremos hoy. En efecto, es la incontinencia. Eso sí, solo se produce en aquellos casos en los que los miomas han crecido de manera considerable.
Eliminación de los miomas en el útero
Lo primero que debe ser mencionado es que, si los miomas uterinos no provocan ningún tipo de molestia o son asintomáticos, no necesitan tratamiento de ningún tipo y la eliminación está desaconsejada.
Pero, ¿qué pasa si la mujer sufre las consecuencias en forma de dolores u otros de los síntomas que hemos descrito antes? Entonces es conveniente visitarse con un ginecólogo u obstetra, el cual en primer lugar averiguará qué tipos de mioma son: intramurales, subserosos o submucosos.
En base a este aspecto y a otros que también adquieren una gran importancia, como las dimensiones de la lesión, la edad de la paciente y si quiere o no quedarse embarazada en un futuro, se determina o aconseja el tratamiento que sería más conveniente en cada caso en concreto.
Uno de los más extendidos hoy en día es la embolización de miomas uterinos. Lo primero que llama la atención es lo poco invasivo que es, ya que no requiere anestesia general. Es habitual que el mismo día en que tiene lugar el proceso ya se dé el alta a la paciente, la cual empieza a notar mejoría al cabo de tan solo una semana.
Aunque la embolización de miomas uterinos es la que prefieren muchas mujeres hoy en día, no hay que obviar otro método que lleva numerosos años poniéndose en práctica. Nos referimos a la cirugía de extirpación que es muy efectiva pero, a cambio, exige un largo período de convalecencia y pasar por la temida anestesia general.