Todos en el mundo estamos conscientes de lo fatídico que es el cáncer. Es una de las principales causas de muerte en el planeta y son muchos los avances de la ciencia que se han concretado para tratar la enfermedad en sus diversas formas y tipos.
La quimioterapia y la radioterapia son los tratamientos comúnmente conocidos para atacar esta enfermedad, pero no todos los casos llegan a una sanación absoluta, puesto que muchos pacientes recaen ante la reaparición de células malignas.
Además, es de conocimiento, prácticamente común, los daños colaterales que estos dos tratamientos hacen al organismo en general y sus efectos secundarios. Pero, existen alternativas que coadyuvan a la mejor eficiencia de estas técnicas y además, colaboran para destruir con más precisión las células cancerígenas.
Estamos refiriéndonos, en este caso, a la Oncothermia o nanothermia. Se trata de un método de hipertermia electro modulada que no es invasiva y que interviene directamente en las células malignas que tiene el paciente, estimulando una respuesta inmunológica positiva, al tiempo que ayuda a reducir el dolor.
Es un procedimiento que repercute en casi ningún efecto secundario y que es recomendado por reconocidos especialistas del sector cuando se trata de la destrucción de tumores que son inoperables. Es decir, cuando nos encontramos en presencia de tumores sólidos, e incluso, metástasis.
Las sesiones o tratamiento se basan en el ataque directo a cada tumor de manera individual o focalizada, ya que llega de forma profunda a cada uno, ocasionando su destrucción.
Cuál es la diferencia entre oncothermia e hiperthermia
La principal diferencia que existe entre la oncothermia y la hiperthermia es que esta última requiere del aumento de la temperatura corporal, la cual llega por encima de lo normal, para poder atacar el tejido tumoral.
La oncothermia, viene a ser la versión más moderna y avanzada de esta, ya que permite aumentar la temperatura de manera focalizada o exclusiva en el tejido tumoral, a través de una frecuencia de 13.56 MHz. Este acción de sobre calentamiento en el tejido ocasiona que las células cancerígenas se desestructuren, logrando en muchos casos, resultados avanzados en el tratamiento de la enfermedad.
Entre sus efectos más significativos, en comparación con la técnica antecesora es que se logra una mayor destrucción de las células malignas, inhibiendo su crecimiento; ayuda a sensibilizar más la zona para que los tratamientos de la quimioterapia o radioterapia se puedan combinar de una manera más eficiente y efectiva y además, se reduce de una manera importante, el dolor en el paciente.
Tipos de cáncer que pueden ser tratados con la oncothermia
En la actualidad, se pueden tratar varios tipos de cáncer o condiciones derivadas de esta enfermedad con el tratamiento de oncothermia. Entre estos se encuentran el cáncer de piel, de pulmón, páncreas, próstata, estómago, colón e hígado. Asimismo se pueden tratar todos los cáncer de condición ginecológica, es decir, de mamá, ovario o cuello uterino.
Además, es efectivo para el tratamiento de tumores de cuello, boca y laringe, en metástasis de tumores primarios o de ganglios linfáticos, así como también se pueden tratar melanomas, carcinomas y linfomas, entre otros.
