¿Cuál es la mayor cantidad de tiempo que has estado sin tener sexo? Honestamente. No es para que nadie se avergüence, en la mayoría de los casos, todos hemos llegado a pasar por un lapso de tiempo de “sequía sexual”. Los motivos de esto pueden ser muchos, tantos que no sería posible enumerarlos, pero por lo general, tienden a ser excusas atendibles, factores comprensibles de aceptar.
Pero mucho más allá de los “esfuerzos mentales” que se hagan para sobrevivir a estas etapas de abstinencia sexual, la mente también percibe esta carencia.
En el siguiente artículo vamos a conocer algunos de los efectos negativos de la falta de sexo en el hombre y sus características más resaltantes.
Aumento de la ansiedad
El sexo es una excelente manera para que las personas logren desahogarse. Según diversos estudios elaborados, las personas que se abstienen de tener relaciones sexuales durante ciertas temporadas son más propensas a sufrir situaciones estresantes. En comparación a aquellas personas que normalmente practican sexo al menos una vez por semana.
¿A qué se debe esto? Los estudios afirman que, cuando se practica el sexo, el cerebro libera oxitocina y endorfinas, lo que nos permite estar más relajados y a gusto con nosotros mismos. Cuando se deja de practicar, los niveles de estrés acumulados son bastante altos.
Aumento del riesgo de cáncer de próstata
Aquellos hombres que dejan de practicar sexo, por lo general, pierden los beneficios que este le puede ofrecer a su próstata. Al menos así lo han demostrado algunas investigaciones donde se indica que los hombres que disfrutan de una vida sexual normal tienden a presentar un 20% menos probabilidades de sufrir de cáncer de próstata.
Entre los motivos que explican esta ventaja tan saludable para la Sanidad del hombre, muchos profesionales han resaltado los beneficios de las eyaculaciones frecuentes. Esto debido a que las mismas ayudan a la eliminación de sustancias potencialmente dañinas para el órgano glandular.
Otras estimaciones fundamentadas en estudios dictan que los hombres que se acuestan con más de veinte mujeres durante toda su vida, pueden llegar a reducir esta probabilidad hasta un 28%.
Disfunción eréctil aumentada
Mantener el miembro viril en un estado de inactividad durante mucho tiempo es un factor que puede aumentar las posibilidades de que no responda positivamente o como se tiene esperado.
Ciertas investigaciones indican el riesgo de sufrir de disfunción eréctil hasta el doble de veces en comparación a aquellos hombres que, como mínimo, practican sexo una vez por semana. Esto ocurre de tal manera debido a que el pene es un músculo que, como otros, se debe ejercitar. Así que, mientras se mantiene activo habitualmente está en plena forma y logra preservar su máxima potencia.
Susceptibilidad a gripes y resfriados
Aunque es verdad que practicar el sexo con una menor frecuencia se podría llegar a traducir como una exposición mínima a gérmenes y bacterias ajenas, esto también genera otros resultados. Pues el sistema inmunológico del hombre va a encontrarse en peores condiciones para defenderse ante los virus más comunes como el resfriado común o la gripe.
Algunas investigaciones elaboradas han encontrado que las personas que practican sexo al menos una o un par de veces por semana, llegan a incrementar sus niveles de inmunoglobina A hasta en un 30%. Así como también se logran ver reforzados los anticuerpos hallados en las membranas mucosas, sobre todo en el tracto intestinal y las paredes internas de las vías respiratorias.
En realidad un aspecto que muy pocas personas llegan a conocer y se sorprenden mucho al ver la relación tan estrecha que existe.