La artrosis la podemos llegar a describir en la actualidad como una patología de carácter reumático donde el cartílago articular pasa a degenerarse por múltiples motivos. Estos percances pasan a derivar en toda una serie de síntomas como dolencias y limitaciones sobre la amplitud articular que van a pasar a disminuir la propia funcionalidad de los pacientes.
En estos casos, los pacientes ven afectada su movilidad y la propia calidad de vida, misma que puede llegar a verse increíblemente deteriorada ante tales dolencias. Entre las causas más habituales que generan esta patología podemos encontrar la edad avanzada, el sobrepeso e incluso factores genéticos del paciente.
¿Qué se conoce como artrosis?
Básicamente la artrosis se describe como un proceso degenerativo de las articulaciones móviles que se logra caracterizar por el deterioro del cartílago articular que, en ocasiones, puede llegar a desaparecer si no está en una fase muy avanzada. Ya en los casos de la tercera edad, tal afección pasa a trabajarse mayormente con los servicios de fisioterapia especializada en personas mayores.
Tal patología puede llegar a generar ciertas incapacidades funcionales sobre los pacientes, aunque en ciertas ocasiones también puede derivar en grados de invalidez que impiden que el paciente desempeñe sus actividades regulares.
La artrosis como mal del milenio
Sin lugar a dudas, todo pasa a ser mucho más complejo si son los genes quienes tienen gran parte de la culpa, se padece de sobrepeso y ya se cuenta con una edad avanzada. Siendo así, en el caso de los genes es difícil actuar, pero ante el envejecimiento prematuro y el sobrepeso sí que podemos hacer algo al respecto. Un ejemplo bastante claro de ello es realiza actividad física y cuidar los valores nutricionales que ingresan a nuestro organismo a través de la alimentación, restringiendo los alimentos altos en azúcar o sal.
Es posible encontrarse en ciertos casos con pacientes jóvenes que sufren esta patología y que dada la intensa actividad deportiva que realizan, someten a ciertas de sus estructuras articulares a un sobreesfuerzo que hace que algunas articulaciones envejezcan más rápido. Esto también se puede presentar por orientaciones deficientes sobre la planificación de los entrenamientos o por sobrecargas extremas. Por tal motivo es que resulta más que necesario acudir a un especialista ante los primeros síntomas, pues con diagnósticos tempranos los fisioterapeutas, con la fisioterapia para artrosis, pueden ayudar a impedir los procesos acelerados de degeneración en situaciones puntuales e incapacitantes.
¿En qué se basa la fisioterapia para artrosis?
A los fisioterapeutas se les conoce por ser los profesionales especializados en las terapias físicas que ayudan a todo lo que concierne a la funcionalidad articular y la reducción de dolencias en estas de manera rápida y eficaz.
Cada uno de los pacientes es distinto y los tratamientos personalizados enfocados a los síntomas que producen mayor preocupación es algo imprescindible, aunque también se debe limitar el alcance en la evolución de las patologías como estas de carácter insidioso. De esta forma, el objetivo de los fisioterapeutas es básicamente disminuir la sintomatología y limitar la progresión de la misma.
¿Cuáles son los tratamientos más populares para combatir la artrosis?
A continuación, te vamos a indicar algunos de los tratamientos más efectivos y populares con los cuales se ha logrado combatir la artrosis en una gran cantidad de pacientes a nivel mundial:
Diatermia Capacitiva
Esta es una de las técnicas más efectivas y longevas de todas, pues ya presenta una antigüedad de más de 25 años. Sin embargo, todavía para muchas personas resulta completamente desconocida, aunque poco a poco va extendiéndose por más y más clínicas enfocadas en la fisioterapia.
Realmente resulta sorprendente observar cómo, en tan solo tres o cuatro sesiones, gran parte de los síntomas simplemente comienzan a suprimirse y mejor la calidad de vida de los pacientes. En realidad no es la panacea, pero es algo a lo que más se asemeja. En nuestros tiempos los deportistas de élite son quienes la han popularizado, haciendo que su reconcomiendo y avance alcance a una mayor cantidad de personas.
Programas terapéuticos de ejercicios
Estas sesiones están enfocadas en atender las limitaciones particulares que puede sufrir cada paciente y se orientan tanto al desarrollo de la fuerza como al mejoramiento de las amplitudes articulares. También destacan por ser un componente primordial para alcanzar una pérdida de peso considerable pues aumentan el gasto energético mientras, de manera simultánea, fortalecen el sistema muscular.
Actividades deportivas
Es una excelente recomendación evaluar cualquier actividad deportiva que pueda realizarse y se encuentre al alcance del paciente. Bien sea ciclismo, natación o sencillamente caminar, lo importante de este punto es que la actividad no vaya a agravar el estado de la artrosis que se padezca.
Terapias manuales
Esta se recomienda para los casos donde sea precisa la relajación intensa de gran parte del sistema muscular que se inserta sobre la articulación afectada. Teniendo así como resultado el mejoramiento de la movilidad y la disminución de las dolencias.
Técnicas de relajación
Una situación muy similar a la presentada con la Diatermia, pues su reconocimiento es bastante limitado así como su empleo en la propia fisioterapia. Y todo ello a pesar de que estas técnicas forman parte de muchos programas de formación universitaria donde el pilar fundamental es la relajación de la musculatura afectada. El objetivo de estas es el de elevar el umbral de percepción de la dolencia, teniendo como resultado la disminución notable del grado de molestia que pueda provocar tal síntoma.
Educación postural
Este tipo de técnica debe estar enfocada al puesto de trabajo y a las diferentes actividades que se realicen durante la vida cotidiana. Básicamente son el medio por el cual resulta posible llevar una vida más activa sin que se pueda empeorar la situación dada la sintomatología que se presente.